En esta cadena circular se involucra a la comunidad de emprendedores y microempresarios de la CMMC, desnaturalizando, clasificando y confeccionando el material, logrando generar ingresos dignos y sostenibles como agentes de cambio que aportan desde su labor al Desarrollo sostenible.
La industria textil desde la producción, distribución, uso, y posterior desecho de las prendas de vestir tiene un gran impacto en el medio ambiente. Durante su producción, el agua resulta contaminada y la energía se transforma en emisiones de CO2 (dióxido de carbono). Por esta razón, la Corporación Mundial de la Mujer Colombia crea el programa Telareciclo, un modelo innovador de aprovechamiento textil de triple impacto, con el que las empresas pueden gestionar sus residuos de manera adecuada, reduciendo su impacto ambiental, generando ingresos dignos y sostenibles a personas que viven en contextos difíciles y haciendo parte de un modelo de economía solidaria y circular que mejora sus indicadores de sostenibilidad corporativa.
La alternativa que brinda este programa es que los residuos pueden entrar a un proceso de reutilización en donde se crean productos corporativos para las mismas empresas generadoras del residuo, y una alternativa de reciclaje en donde se recuperan las fibras para ser aplicadas en productos finales como hilos e hilazas, telas, fieltros, relleno para cojines, almohadas o peluches y traperos.
Actualmente se opera en Bogotá y Cali y se está en la búsqueda de empresas generadoras de estos residuos en otras ciudades de Colombia para su futura expansión.
Lo más importante de este modelo, es que extiende el ciclo de vida de las prendas evitando que se desechen por completo como ocurre con procesos de incineración o disposición en vertederos, los cuales además tienen un factor de emisión de 0,41 kg CO2 y de 0,84 kg CO2 por cada kilogramo de residuo dispuesto respectivamente, comparado con el modelo Telareciclo que genera una emisión de 0,15 kg CO2 por kilogramo de textil.
Además de la reducción del impacto ambiental, se mejoran los indicadores sociales con la inclusión de comunidades que se ven beneficiadas por la generación de ingresos al participar en procesos de pretratamiento de los residuos para su posterior fase de aprovechamiento. Finalmente, el programa promueve el principio de economía circular ya que los residuos textiles son reintegrados a la cadena productiva y de consumo como nuevos materiales.