Por Carlos Rangel – Country Manager de Semantix
En más de un episodio de la galardonada serie «Mad Men», el director creativo Don Draper observa a través del humo de su cigarrillo. Y en los últimos cinco minutos, cuando nadie tiene una buena idea, salva el día: de su mente creativa saldrá la estrategia multimillonaria para empresas internacionales de primera línea. Los clientes se irán contentos y todo funcionará bien.
Pero hoy, esos días de la década de 1950 donde el destino de las corporaciones se basaba en las ideas de gurús y líderes carismáticos han quedado atrás. Porque para 2025 se estima que el mundo generará un total de 463 millones de exabytes por día, la información equivalente a 213 millones de horas de películas cada 24. En este contexto, las plataformas para gestionar grandes volúmenes de información nunca han sido tan necesarias.
Según Statista, se pronostica que el mercado global de big data crecerá a US$103 mil millones para 2027, más del doble de su tamaño de mercado en 2018. El segmento de software representaría una participación del 45%, el segmento de mercado de big data más grande. Mientras tanto, se estima que el mercado de software como servicio alcance los 208.000 millones de dólares en todo el mundo para 2023. Una situación que podría crear más de un dolor de cabeza a nuestro amigo Don.
Sumerjámonos en decisiones basadas en datos
¿Qué importancia tiene la gobernanza de datos para las empresas? Los datos son sin duda uno de los activos más valiosos de una organización. Son importantes para obtener la información necesaria para involucrar a los clientes y llevar a cabo prácticas comerciales esenciales. También ayudan a supervisar el trabajo realizado, analizar sus resultados y generar un compromiso de mejora continua.
Un programa de gobernanza de datos bien diseñado puede aportar un valor real y tangible a su organización, dando como resultado la calidad de los datos, la reducción de riesgos y un acceso más rápido a información de mayor calidad. Seamos realistas Don: tener un gobierno de datos efectivo significa información más limpia, más consistente y más utilizable. Esto asegura que los datos sean precisos y que las conclusiones se basen en pruebas sólidas. Parece que la era de la decisión personalista ya pasó…
Entonces… ¿Significa esto que la creatividad y la intuición de las personas ya no son aspectos importantes en la definición de la estrategia corporativa? ¿Reemplazará la tecnología al factor humano en el gobierno organizacional? ¿Cómo podemos coordinar la tecnología con procesos que todavía hoy involucran a las personas?
Creatividad basada en datos
La intuición siempre será un motor para comenzar a modelar una estrategia corporativa. Pero podemos usar datos para confirmarla -o no-. Por lo tanto, debemos pensar cómo usar la tecnología para involucrar a las personas de manera adecuada porque, en muchos casos, los procesos de negocios se basan en excepciones, que requieren interacciones humanas.
Y una empresa en crecimiento que quiere acelerar las ganancias y reducir los riesgos debe ir más allá de los entornos estructurados en los que a menudo se basa la automatización. Las personas, con sus propias cualidades especiales, continúan estando en el centro de estas decisiones, y la tecnología debe aprovecharse para ayudar a capturar y sintetizar procesos humanos, no solo para la innovación o la toma de decisiones. De esta manera, el factor humano no se borra de la ecuación, de hecho es más importante que nunca. Pero debe ser contextualizado y aprovechado por los datos. Tómatelo con calma Don: estamos aquí para ayudarte.
En esa dirección, es importante que cada área de la organización entienda el valor de esta estrategia de gobierno corporativo; y no tenga dudas sobre su adopción. Así, por ejemplo, los equipos de ventas y marketing podrían mejorar sus resultados utilizando datos de mayor calidad para crear campañas más específicas; o el área de compras podría reducir costos utilizando datos gobernados para optimizar los procesos de compra y la cadena de suministro.
La gobernanza de datos llegó para quedarse, ya que las decisiones comerciales basadas en datos todavía no son suficientes. Cada vez son más las empresas que recurren al análisis de datos para optimizar su rendimiento. Pero para obtener los mejores resultados de este proceso, se debe trabajar con conjuntos de datos limpios y bien organizados en los que todas los que participan en su organización puedan confiar. Trabajemos juntos Don, construyamos un futuro más predecible para las personas y las empresas.