Un proyecto europeo destinado al aprovechamiento de la energía solar en el espacio para cubrir las necesidades de energía limpia en la Tierra
Thales Alenia Space, la sociedad conjunta constituida entre Thales (67 %) y Leonardo (33 %), ha sido seleccionada por la Agencia Espacial Europea (ESA) para dirigir el estudio de viabilidad del proyecto SOLARIS, que tiene por objetivo determinar la factibilidad de un proyecto de plantas de energía solar en el espacio para producir energía limpia para la Tierra.
Europa, con su objetivo de cero emisiones netas, pretende alcanzar la neutralidad en las emisiones de gases de efecto invernadero de aquí a 2050. Para cumplir con este ambicioso objetivo, el sector energético europeo debe orientarse hacia fuentes de energía renovables, modulables, asequibles y disponibles en todo el mundo. La energía solar en el espacio es una solución prometedora para atender a esta necesidad.
Thales Alenia Space lidera un consorcio de empresas que pretende diseñar una solución ambiciosa para Europa consistente en captar la energía solar en órbita, donde no se ve afectada ni por las condiciones meteorológicas ni por la noche, para luego enviarla a la Tierra. El estudio de viabilidad del proyecto SOLARIS debería ayudar a Europa a tomar una decisión informada de aquí a 2025 sobre la puesta en marcha o no de un programa de desarrollo para el aprovechamiento y comercialización de la energía solar en el espacio, comenzando con el diseño de un demostrador inicial en órbita a escala reducida.
SOLARIS es un proyecto que recibió el apoyo del Consejo Ministerial de la ESA en noviembre de 2022, con el objetivo de hacer de Europa un actor clave y potencialmente líder en la carrera internacional por hallar soluciones energéticas limpias y sostenibles para mitigar el calentamiento global de origen antrópico. Thales Alenia Space liderará este estudio de viabilidad con el objetivo de desarrollar nuevos conceptos para implementar un sistema que proporcione energía solar desde el espacio, mediante tecnologías facilitadoras como paneles solares espaciales de alto rendimiento, la transmisión de energía inalámbrica y el montaje robotizado en órbita. Estos estudios servirán para orientar las actividades de investigación y desarrollo que se llevarán a cabo posteriormente.
Lejos de competir con las energías renovables terrestres, la energía solar espacial podría complementarlas, ya que se trata de una energía disponible las 24 horas al día y los 7 días de la semana, con lo cual facilitaría un suministro eléctrico continuado, sin necesidad de contar con sistemas de almacenamiento de gran capacidad.
El consorcio de empresas europeas responsable de estos estudios cuenta con una amplia complementariedad de capacidades en distintas áreas: en sistemas orbitales con Thales Alenia Space, en aviación con Dassault Aviation, en asesoramiento estratégico con Arthur D. Little y por supuesto en energía con Engie, ENEL y Air Liquide, una prueba del alto potencial que alberga este proyecto para el sector energético a nivel mundial.