Más del 90 % de las grandes empresas en el país realizan reportes de sostenibilidad y con ello, evidencian, gestionan y optimizan el manejo de sus residuos posconsumo.
El pasado año finalizó con un panorama no muy alentador para la economía y desarrollo del país, con una disminución económica del 8 %, altas tasas de interés y una devaluación significativa del peso colombiano. Sin embargo, hay algunos frentes que debemos destacar y sacar máximo provecho durante este 2023 ya que cuentan con un potencial de progreso y crecimiento, planteando un futuro muy esperanzador para Colombia.
Estos son los proyectos de impacto, los cuales están tomando cada vez más fuerza en el país y se han convertido en referentes para toda la región y a nivel mundial gracias a su aporte social, ambiental y financiero, siendo premiados por reconocidos organismos y entidades internacionales. Asimismo, cabe destacar que el territorio colombiano es el segundo país con mayor biodiversidad y se convierte en una de las potencias mundiales a nivel medioambiental.
“En Colombia se vienen dando concentraciones de distintas fuentes que brindan un panorama único en el hemisferio: grandes flujos de cooperación internacional, inversión pública sostenida, maduración de la filantropía catalítica y crecimiento de la inversión e innovación financiera en temas de impacto. Asimismo, fue el primer país del mundo en desarrollo en emitir un Bono de Impacto Social, y tiene ya tres instrumentos que le siguieron a este. Vivimos en una mina de oro, entendiendo que la rentabilidad estará ligada a la conservación de lo que tenemos, y esta es una oportunidad que requiere evolucionar y tomar acciones determinantes. En el impacto está el futuro, y desde los estudios e informe realizados en Innpactia vemos que el sector privado del país ya está invirtiendo voluntariamente más del doble de lo que está invirtiendo el sector público en este frente”, aseguró Juan Carlos Lozano, Director y Fundador en Innpactia.
De acuerdo con ‘The Sustainability Yearbook’, informe en el que destacan a las empresas que fueron más sostenibles durante el año, de 7.554 compañías evaluadas a nivel mundial, 16 de ellas eran colombianas, aumentando dos participaciones de nuestro país en comparación al anuario de 2021. Asimismo, más del 90 % de las grandes empresas en el país realizan reportes de sostenibilidad y con ello, evidencian, gestionan y optimizan el manejo de sus residuos posconsumo.
Para desarrollar estos proyectos que prometen mejorar el futuro y la vida de los colombianos existen alternativas como Innpactia, la plataforma aliada que conecta los proyectos de alto impacto con oportunidades de financiamiento y más de 500 asesores expertos para impulsarlos y financiarlos, ampliando la oportunidad de combatir las desigualdades y avanzar hacia la agenda 2030 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
“Los inversionistas están poniendo más atención a los reportes y mediciones del impacto, al punto de que cerca del 80 % de ellos consideran que los factores ambientales, sociales y gubernamentales son centrales para la toma de decisiones financieras. Crear nuevos mecanismos para aumentar los recursos financieros que buscan la generación de impacto como nuevos empleos, y encadenamientos productivos inclusivo,s son clave para el crecimiento y desarrollo del país; y más aún reconociendo que Colombia tiene personas con experiencia en temas de medición de impacto, de gestión de proyectos, de gestión de recursos y personal técnicamente apropiado para la ejecución de los proyectos”, finalizó Lozano.
Colombia ha desarrollado un gran avance frente al cambio de pensamiento hacia un enfoque de impacto. Sin embargo, se debe reforzar el trabajo en este frente para seguir destacando como país y superar de la mejor manera la serie de desafíos ambientales que tiene por delante y requieren una revisión minuciosa para 2023, como lo son la deforestación de la Amazonía, la protección de los anfibios, el cambio y la transición energética, y el Acuerdo de Escazú.