De acuerdo con el Estudio de las oportunidades de la digitalización en América Latina frente al Covid-19, Latinoamérica y el Caribe se encuentran en un nivel intermedio en cuanto al desarrollo de ecosistemas digitales.
La creación de ecosistemas digitales, ese conjunto de herramientas plataformas y aplicaciones que se unifican bajo una misma visión y estrategia, ha sido una de las mejores tácticas para lograr el posicionamiento de los negocios; trayendo consigo que el mercado se diversifique no solo a nivel de plataformas y dispositivos sino también en formas de interacción con los clientes. Esto, a su vez, ha ayudado en lograr la fidelización del cliente; generando que sus intenciones de compra sean más recurrentes.
Aunque Latinoamérica continúa en un nivel intermedio en el desarrollo de estos ecosistemas, estamos a tiempo de cambiar el panorama y mejorar en la presencia de marca. Al respecto, Juan Arley Gómez, product manager de InterNexa afirma que “se requiere de una omnicanalidad robusta y acertada para la marca; además de la construcción de los entornos digitales que deben girar alrededor de la premisa de que el mercado actual muta constantemente, al igual que las formas de interacción entre personas que busca que cada vez se hagan más cómodas y sencillas”.
Los cambios en los modelos digitales de la compañía requieren mantener la comunicación entre los usuarios y la empresa para crear conexiones fuertes que permitan un flujo constante del buyer journey y construyan comunidades robustas para solidificar la reputación de marca.
Características que debe tener en cuenta en la construcción de su ecosistema digital:
1. La red es la fuente de todo
Las conexiones deben existir tanto de la marca hacia los usuarios como entre plataformas y herramientas digitales, permitiendo así una interacción usuarios, productos y servicios.
2. Este tipo de ecosistemas consistentes son puertas a otros mercados
Cuando una marca ha logrado implementar un buen entorno digital y construido una comunidad sólida de usuarios interesados en sus productos y servicios, desarrolla una red que es capaz de atravesar las barreras de su propia industria, conectando con productos y servicios de otros mercados.
3. Generar y aprovechar la data recolectada
La construcción de comunidades permite que se pueda generar, recoger y explotar data recolectada al interior de un ecosistema digital, habilitando una escucha continua para mejorar los productos, cambiar los procesos de los servicios, y elevar la experiencia de los usuarios.
Beneficios:
- Permiten el aprovechamiento de las sinergias existentes entre productos, servicios y mercados (en ecosistemas más robustos)
- Los usuarios cuentan con accesos sencillos e integrados a las diferentes herramientas habilitadas (medios de comunicación, compra y soporte).
Riesgos:
- Un ecosistema digital robusto puede generar una concentración de poder entre unas pocas empresas.
- Dicha concentración de poder lleva a la escasez de competencia, debilitando el mercado y relegando la innovación y la oferta hacia los usuarios.
Aunque los ecosistemas digitales sean una buena herramienta con grandes beneficios, es importante que cada nación apoye la innovación en el mercado, manteniendo un marco regulatorio claro para estos donde las políticas de competencia preserven la economía digital, sobre todo en América Latina donde se encuentra rezagada respecto a Europa Occidental, América del Norte, Europa del Este y los Estados Árabes.
Así mismo, es importante que estos procesos hagan parte de una estrategia de transformación digital que implica una apuesta por la digitalización y la tecnología de manera integral. Adelantar proyectos de analítica, conectividad, seguridad, cloud, entre otros que acompañen estos procesos y permitan a las compañías mantenerse a la vanguardia y hacer frente a una realidad cada vez más digital.